EL ALMA EXISTE????


DOCTRINA DEL HOMBRE

Wayne Grudem, Teología Sistemática. Traducido por Miguel Mesías et al. Miami: Editorial Vida, 2007.
De manera específica esta sección o “Parte” como el autor lo llama, está dividida en 4 capítulos, que abarcan de la página 459 hasta el 539.
“Escudriñarlo todo y retener lo bueno” parece ser el lema base de esta crítica a este libro, ya que de manera explicitica o implícita presenta ideas, que en cierta manera leídas sin detenimiento y sin tener una base sólida de la verdad, de seguro que se terminara adoptando las misma enseñanzas.
En este extenso capitulo Gruden hace un recorrido minucioso de cada aspecto de la vida del hombre, esto se remonta hasta sus inicios de cómo fue creado. Antes de ello, aunque con algunas presupociones machistas comienza a configurar el vocablo “hombre” (Adam) solo y únicamente para el uso particular de los varones, y que Dios le concedió al hombre la subordinación de la mujer aun antes de que el pecado entrara a este mundo, consecuentemente presentá la razón única de la creación del hombre, sin objeciones y sin buscar variables en la razón del porque la creación del hombre, Grudem afirma que “Dios no necesitaba crearnos…pero lo hizo solo y únicamente para rendirle gloria” (462)  para Gruden ese sería la razón básica y primordial por la que le hombre fue creado, y cuando entramos al terreno del modelo o el prototipo para la creación del hombre, sin mayor dificultad presenta al hombre como la imagen de Dios, pero ¿Qué aspectos del hombre son semejantes a Dios? Antes de responder a esta pregunta Grudem afirma “el hecho de que el hombre sea la imagen de Dios, quiere decir que el hombre es como Dios y representa a Dios”, consecuente a esto presenta la menos cinco fases o aspectos como el los llama en el cual el hombre se parece a Dios: aspecto moral, espiritual, mental relacional y físicos. En cada una de ellas presenta como es que el hombre se parece a Dios y es menester, en este resumen resaltar al menos dos aspectos, que más adelante se tendrá en  cuenta para las críticas, la primera es el aspecto espiritual, Grudem se toma la molestia de especificar y dejar bien en claro su punto de vista con relación al hombre como imagen de Dios en el aspecto espiritual, el afirma “tenemos no solo un cuerpo físico, sino también espíritus inmateriales, por tanto podemos actuar en la esfera inmaterial, espiritual” al mencionar esto de una u otra manera Grudem nos muestra que para una adoración completa y cabal a Dios necesitamos algo más que el cuerpo, algo que este en la esfera de Dios, lo cual para Grudem como lo mencionaría más delante de manera explícita es el “el alma”. La otra esfera a considerar es el aspecto moral donde abiertamente menciona “todos tenemos en un sentido interno de lo que es bueno y de lo que es malo” terminaría considerando que aun cuando el hombre este en pecado la imagen de Dios aún no está borrado completamente.
Discutido este tema a profundidad con aire de satisfacción, Grudem pasa a discutir el tema de la naturaleza esencial del hombre, donde introduce tres palabras o grupos como el los denomina que luchan por la interpretación correcta con relación a la naturaleza esencial del hombre, estas palabras vendrían a ser: tricotomía, dicotomía y monismo. Gruden comienza con la critica a las tricotomistas afirmando certeramente que su interpretación es errada, a ello le suma la interpretación que algunos teólogos han sugerido que el hombre es un ser completo un todo, que para el vendría a ser el monismo, pero que también esta posición de la esencia del hombre estaría errada. Entonces de manera rápida  presentara que el hombre es una composición dual es decir sería una “dicotomía”, aunque referidas veces evita decir que el hombre es un ser dual, Grudem simplemente lo denomina que el hombre es una composición de  “cuerpo y espíritu o alma” que para estas palabras significarían los mismo, es decir estos dos elementos, cuerpo y espíritu nos son independientes ni antagónicos, sino que conforman una unidad. Seguido a esto hace referencia a muchos textos donde menciona de que el hombre es una composición de cuerpo espíritu, y que finalmente llegaría a la conclusión de que el alma es “inmortal” o como Grudem bien lo denominaría cuando el hombre muere, su esencia “inmaterial sigue vivo” y frente a la pregunta ¿Cómo es que se forma el alma? Gruden responde “el padre y la madre ayudan hasta cierto grado en la creación del alma que Dios otorga a los niños al momento de nacer”.
Finalmente Gruden termina estudiando el origen del pecado, donde muestra que a causa del pecado de adán nosotros no pasamos a ser pecadores sino que “adoptamos” la naturaleza pecaminosa “ solo eso, y sin mayor preámbulo presenta a las famosas “categorías de pecados” donde algunas son peores que otras y que por ende merecen mayor castigo, finalmente Gruden cierra su tratado, de esta sección verificando las consecuencias nefastas que trae el pecado sobre el que las comete y el castigo que cada uno de ellos han de recibir a causa de ella.
Cuestionario
La manera como presenta Gruden su punto de vista o la metodología que usa es argumentativo-bíblica, es decir todo su argumento estará basado en la Biblia, con interpretaciones erradas y sacadas de su contexto, pero trata de hacer que su texto este basado en la Biblia.
Grudem menciona texto Bíblicos que hablan del tema pero que necesariamente no dicen lo que el menciona, un clásico de ello es por ejemplo cuando coge textos como Eclesiastés 12:7 cuando menciona “y el espíritu vuelve a Dios que lo dio” acompañado de otros textos más ((Gn 35:18; 1Re 17:21; Is 53:12) donde aparentemente muestra que cuando el hombre muere algo sale de su cuerpo, que en este caso vendría a ser el alma, por ende concluimos que la mayoría de los textos bíblicos usados están hermenéuticamente mal usado y que por ende no es fiel a las escrituras. Y con relación a las fuentes (libros) que usa básicamente son de índole evangélica, y que en algunos de los casos hace referencia a sus propios libros que han sido escritos por el mismo, esto explica del porqué de sus presupociones por ejemplo al mencionar, como se dijo anteriormente, en el origen del hombre Dios le habría dado toda potestad al hombre aun antes de que entrara el pecado y que real culpable del pecado no sería adán sino más bien Eva, porque ella es quien fue tentada y que en todo caso ella es sola es la que debió haber recibido el castigo. Por otro lado se pregunta ¿Por qué la Biblia ves tras ves hace referencia al alma, espíritu? Entonces dice él, debe haber algo que exista aparte del cuerpo, es decir cree que tenemos un alma y que esta a su vez es inmortal.
 Pero como se mencionó en la introducción de esta crítica algunas presupociones los presenta de manera implícita (como el dominio del hombre sobre la mujer o la imagen de la mujer a partir del hombre y no de Dios) pero que también en otros casos lo hace de manera explícita (tenemos un alma y esta es inmortal). Y al momento de presentar su teología lo hace con la misma ambigüedad que sus presupociones y aun cuando guarda ciertas contradicciones (cuando afirma que los animales no puede parecerse a al hombre y menos a Dios; mientras que por otro lado afirma algunos animales superiores con destrezas son igual o parecidos nosotros) trata de presentar la misma idea a lo largo de su texto.
 Hay mucho que criticar con relación al argumento presentado por Grudem, pero que por cuestiones de tiempo y espacio es menester que el lector sepa que solo se tendrá en cuenta algunas de ellas o las que más resaltan y las que son dignas de ser consideradas
La primera de ellas es el hombre fue creado únicamente para la gloria de Dios, aunque a decir verdad esto puede ser considerado como cierto, pero no es el todo de la razón, esto lo vemos reflejado en las palabras de Cairus al decir:
“Es cierto que la humanidad existe para la gloria de Dios, pero no porque lo quiere como un tipo de coro cósmico que cante sus alabanzas. Antes bien ellos contribuyen a la gloria de Dios porque fueron ideados en una manera sumamente digna de alabanza, para tener un compañerismo amante con el”[1]

Es decir una de las cusas entre otras a considerar es el hecho de que Dios es un Dios que le gusta relacionarse; un Dios que le gusta compartir vivencias con sus hijos (Gn 5:22; Ex 25:8) ves tras ves se ve la frase “y camino Dios con…” significa que Dios le gusta relacionarse. Es interesante ver que Grudem muestra de que una de las cosas en las que somos la imagen de Dios dice: “es que somos semejantes en el aspecto relacional” pero parece no considerar este punto ya que solo enfatiza la relación que existe entre la trinidad divina y que esto se ve reflejada en la relación de los humanos. Y cuando habla de la creación que Dios creo al hombre primero fue, dice el, porque era el más importante y que la mujer vendría a causa del hombre, esto es incierto ya que fue Dios quien dio dominio a ambos; que con relación a la palabra “hombre” no es un adjetivo único del varón sino que es de ambos (Gn 5:2) al confirmar esto Cairus vuelve de decir: “la historia de la creación no se mueve desde lo superior hasta lo inferior; en la creación es opuesto, de las inferiores a las superiores, para la creación de la mujer seria polvo doblemente refinado, uno más removido dela tierra”[2] y lo último tal vez a considera es el aspecto de la vida o lo esencial del hombre, donde Grudem muestra de que el hombre tiene un espíritu inmaterial y que esta a su vez no puede morir, cita el texto de las palabras de Jesús cuando dice “temed al que mata al alma y no al cuerpo” texto como estos para Grudem estarían de manera explícita apoyando la posición que adopta. Pero si bien es cierto que esta forma de pensar no es de actualidad sino que este forma de pensar se remonta hasta los días de los grandes pensadores griegos donde se creía que el hombre tenía o estaba dividido en dos dimensiones: lo materia y espíritu. Y que el cuerpo en cierta forma era un tipo de cárcel para el espíritu que podía vivir sin estar limitado al tiempo y al espacio. Aquí hay dos cosas que es menester resaltar y es el hecho de que si creemos que tenemos un cuerpo inmaterial como lo denomina Grudem entonces nuestro cuerpo se relaciona con alguien que también no está limitado al tiempo y al espacio, esto significa que el Dios de Grudem es un Dios atemporal, esto no lo dice explícitamente pero lo presenta de una manera clara, pero sabemos que Dios es temporal, capaz de estar dentro de la esfera de los hombres que hasta puede relacionarse con ellos. La segunda idea es que según las afirmaciones bíblicas, cuando el hombre fue creado, se dice que Dios insuflo en su nariz el aliento de vida, no dice que le dio un alma o algo por el estilo. Repetidas veces la Biblia presenta al hombre como una unidad completa que no es dual sino que el hombre es “es un espíritu viviente” o “un alma viviente” pero  ¿Cómo funciona esto? La respuesta que otorga Terreros sería la más acertada “un alma viviente es el resultado de la unión por el poder creador de Dios, del cuerpo con el aliento de vida que el provee”[3] es más de las 754 veces que aparece la palabra nefesh (alma) esencialmente se refiere al yo del hombre, y que cuando este muere el aliento de vida simplemente desaparece.


[1] Aecio e. Cairus, “hombre”, tratado de teología, George w. Reid ed. Trad. David gullon (buenos aires; aces, 2009), 235.
[2]Ibid.
[3]Marco Terreros, Teología sistemática concisa: para laicos, pastores y estudiantes (Medellín: Ediciones mártir, s/f, 272.

Comments

Popular Posts